Bendito café

Foto: Ignitethem

Adoro el olor de café por las mañanas, aunque sea incapaz de tomármelo solo.

Adoro el café con leche a primera hora de la mañana, de pie mirando la plaza o delante del ordenador con los primeros emails.

Adoro el café de los domingos con el amore dónde el tiempo no importa, sin importar que hora es ni lo que venga después.

Adoro el segundo café del día en el bar de siempre con un mini y el periodico. Que se pare el tiempo y tenga tiempo de leerlo todo.

Adoro estos momentos de tranquilidad dónde no existe nada más.

Adoro el bendito café, que feliz me haces.